miércoles, 8 de abril de 2009

Sombras


Le tengo miedo a las sombras, a aquellas formas que hay en los rincones de mi cuarto.
Siento el galope de mi corazón, que quiere salir, quiere esconderse para que ellos no escuchen sus latidos.
Miles de fantasmas dan vueltas en mi cabeza.
Hay uno de ellos bien alargado, como hecho de humo, que me mira con los ojos vacíos de oscuridad.
No dice nada.
Solo espera a dar el zarpazo final. Yo solo lo miro.
En la profundidad de sus ojos se ve la nada.
Y parece que la nada es algo terrible. Es un vacío que se asemeja a aquel reloj que de la hora del próximo homicidio.
El frío sudor corre por mi mente. Tengo las piernas entumecidas.
Mis armas de plástico están en el ropero. Mis héroes también.
Desde el fondo escucho el silbido del sueño ajeno.
Nunca les confesé mis miedos.
La impotencia me deja casi inmovilizado.
¿Quienes se esconden detrás de ese telón negro?
Esa especie de escenario, que tiene funciones con cada uno de nosotros.
Ellos entran en acción cuando yo encuentro mi silencio.
Quieren que les preste atención, que los reconozca, que los aplauda.
Pero no puedo.
Estoy inmóvil, ahogado bajo su peso.
Siento que la cama ha moldeado mi cuerpo y estoy en una trampa a mi medida.
Un caudal de lágrimas silenciosas se derraman en mi rostro.
Mientras más fijo la vista, las figuras son más reales.
De día ellos no aparecen, y solo quedamos mis juegos y yo.
Le tengo miedo a lo que no puedo ver, a mis silencios, a mis fantasmas.
Un día las fantasías se disolvieron con el zumbido de una bala.
Con el trayecto de ese proyectil que paso cerca de mi oreja y mató a la mujer que no le entregó la cartera.
Mi temor se transformó en un niño. En un pequeño que gatilla antes de aprender a atarse los cordones.
Mi temor se transformó en tristeza.
Vuelven aparecer las sombras. Ahora un poco más bajas.
Ahora un poco más reales
Ellas se esconden detrás de unos pequeños pies descalzos.
Detrás de la inocencia moldeada por un sistema.
Ya no tengo miedo.
Tengo impotencia.

2 comentarios:

Ale dijo...

hola me encanto esta entrada, muy lindos versos, muy expresivos.

Es dificil encontrar este tipo de cosas, te invito a ver mi blog y si me dejas poner en mi blog esta entrada.

saludos

La Docta Internacional dijo...

Gracias. ¿Quien más?. Dale nomás con la entrada. Te vi tocando la guitarra en tu blog. Esta buena la letra che.
Abrazo